OTOÑO
Empezó el otoño. Empezó a llover.
Acabó el verano. Te dejé de ver.
Qué triste mi vida. Qué triste sin ti.
El pueblo, aburrido. El camino, frío.
El día, más corto. La noche, más larga.
Qué corta la vida. Te fuiste enseguida.
Qué triste existencia desde que partiste.
Quisiera agarrarte y no separarnos.
Quisiera volar, cogerte y marcharnos.
Que tú aparecieras y me acompañaras.
Marcharnos lejos, muy lejos de aquí.
Donde ya la muerte no nos encontrara.
Y si un día apareciese y nos encontrase,
poder evitarla, poder esquivarla.
La vida se vive. La vida se pasa.
La vida se gasta en un santiamén.
Corriendo, corriendo desapareciste.
Corriendo, corriendo te reencontraré.
Pues la vida pasa,
se vive enseguida.
La vida se escapa.
Y la muerte… ¡ay!
La muerte aparece,
tan rápidamente,
que asusta encontrarla.
6 de octubre de 2015